"Hace unos años tuve un problema con mi coche. Más que un problema, fue un problemón que me hizo descubrir de golpe que mi aseguradora no se haría cargo de ciertas coberturas que yo esperaba tener en mi contrato… como por ejemplo una sencilla asistencia en carretera.
El problema era que en cualquier momento, sin ninguna causa justificada ni ningún indicador que me avisara con anterioridad, el coche se apagaba. Ya podías ir a 30 km/h por el centro de Valencia o a 120 km/h por una autopista en plena noche, el coche se apagaba sin poder arrancarlo hasta unos segundos, eternos, después.
El asunto era realmente grave: cuando tu coche se apaga deja de funcionar al 100%, olvídate del ABS, la dirección asistida, las luces… en fin, de todo aquello que te permite tener el control de tu vehículo y que te proporciona seguridad al volante. Mi coche se convirtió en una peligro en potencia, para mí, mis acompañantes y para todos los que circulaban por la misma vía.
Después de llevarlo a nuestro mecánico de confianza, y tras unos días de análisis para averiguar la causa de semejantes sustos, se concluyó que el problema era la bomba de gasolina del coche. Por desgracia, el único taller oficial que podía arreglarlo estaba situado en Dénia.
En aquel mismo momento me puse en contacto con mi aseguradora, Línea Directa, la compañía con la que llevaba desde que el coche salió del concesionario, aproximadamente unos 12 años. Tras tanto tiempo de permanencia en esta compañía, a la cual no se le había dado ningún parte anteriormente, tuve que enfrentarme a un hecho: no podían proporcionarme un servicio de grúa para trasladar el coche desde Valencia hasta Dénia. Mi aseguradora no podía cubrir los 105 km de distancia que debía recorrer para solucionar el problema de la bomba del coche.
Al firmar mi seguro se indicaba, dentro de las coberturas, la asistencia en carretera y el traslado del vehículo hasta el taller más cercano. Pero, ¿qué sucede si el único centro oficial está fuera del límite de km que cubre tu seguro?
Llegados a este punto te quedan dos opciones:
Uno: coge tu coche y mételo por la autovía o la autopista y recorre más de 100 km, y arriésgate a que el coche pueda pararse en cualquier punto sin previo aviso.
Y dos, y lo más lógico: búscate, por tu cuenta, una grúa y paga el trayecto.
Finalmente, opté por pagar una grúa privada para que llevara el coche hasta el taller oficial de la bomba, y la aseguradora, por supuesto, no se hizo cargo del coste del transporte.
Obviamente, a día de hoy, ya no es mi aseguradora. "
– Diego
[…] Al firmar mi seguro se indicaba, dentro de las coberturas, la asistencia en carretera y el traslado del vehículo hasta el taller más cercano. Pero, ¿qué sucede si el único centro oficial está fuera del límite de km que cubre tu seguro? […]